El día 4 de enero de 1.904, nace en Ronda el
torero que diera lugar, con su descendencia, a la segunda
dinastía torera rondeña. Se llamaba Cayetano Ordóñez Aguilera, conocido en el mundo de los toros como
"El Niño
de la Palma", sobrenombre que adoptó de la zapatería
"La Palma", situada en la calle Santa Cecilia número 8
de Ronda, que era regentada por su padre. No tenía Cayetano
antecedentes taurinos entre sus progenitores, pero sí entre sus
hermanos. Según indica el "Cossio", el sobrenombre de
"Niño de la Palma" lo había utilizado anteriormente
su malogrado hermano Antonio, el primero de la familia que quiso
ser torero, practicándolo con buenas aptitudes, aunque sin
llegar a altas esferas.
Cayetano, en su andadura de novillero, fue
saltando de éxito en éxito, hasta el punto de que un periódico
de Cádiz, dijo de él: "El que estas cuartillas emborrona,
rindiendo culto a la verdad, proclama como el mejor torero que ha
pisado este ruedo en la actual temporada al Niño de la
Palma".
En 1.925, Juan Belmonte le da la alternativa en
Sevilla, triunfando de forma apoteósica. Al mes siguiente la
confirmó en Madrid con otro éxito rotundo. Su carrera de
matador de toros, en una época donde el público era mucho más
exigente que en la actualidad, sobrevalora la condición de
torero del Cayetano Ordóñez. Dice de él José María de Cossio, que "El Niño de la Palma reunió todas las
condiciones y aptitudes que debieron haberle convertido en el
diestro dominador, eje de la torería de su época".
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